jueves, 13 de agosto de 2009

TECNICAS DE TRADING. QUE ES LA LIQUIDEZ DE UN ACTIVO FINANCIERO.

El concepto de liquidez nos informa de la posibilidad más o menos importante que tiene un activo financiero para poder ser transformado en dinero en efectivo de manera más o menos rápida y sin que esa conversión suponga una pérdida de su valor. Por ello, en función de la facilidad de un activo cualquiera de poder ser transformado en dinero se dirá del mismo que es más o menos líquido. En base a esta definición, podemos decir que, el activo más líquido del mercado es, evidentemente, el dinero, tanto el que se halla en poder del inversor como aquél que se halla depositado en bancos, cajas y demás intermediarios financieros, siempre que se halle depositado bajo la modalidad denominada “a la vista” –al poder ser rescatada por los depositarios en cualquier momento-.
Por el contrario, uno de los activos menos líquidos que existen son los inmuebles pues son activos difícil de vender o cuando menos, el propietario de un inmueble, necesita un tiempo prolongado desde que toma su decisión de vender hasta que la misma se hace efectiva.

Normalmente a mayor liquidez de un activo, menor es rentabilidad. Por ejemplo, los depósitos a la vista son inversiones de muy baja rentabilidad, siendo mayor su rentabilidad si el depósito lo es a plazo.

Entre las características generales de los bienes líquidos podemos destacar:

1. Los activos líquidos pueden venderse con bastante rapidez obteniendo su conversión en dinero.

2. Generalmente su pérdida de valor al convertirlos en dinero suele ser mínima.

3. Son productos atractivos para los inversores, por lo que suelen haber siempre compradores para dichos activos.

Los mercados bursátiles donde los activos negociados son muy líquidos son mucho más atractivos e interesantes para los inversores. Por ello, el inversor debe intentar evitar invertir en mercados y valores poco líquidos, donde puede quedar atrapado por falta de contrapartida a su posición, con la pérdida casi segura de su inversión o de una parte importante de rentabilidad.